La antigua ciudad de Pérgamo (griego Πέργαμος) se hallaba situada en el
noroeste de Asia Menor (actual Turquía), a 30 km de la costa del mar Egeo y
frente a la isla de Lesbos, en la región llamada Eólida. Sus ruinas rodean a la
actual ciudad de Bergama, construida sobre los cimientos de lo que fue la parte
baja de Pérgamo.
En 2014, la Unesco eligió a Pérgamo como Patrimonio de la Humanidad.
Historia
La leyenda dice que la ciudad de Pérgamo fue fundada por Pérgamos, hijo de
Neoptólemo y Andrómaca, todos ellos personajes de la Guerra de Troya. En el año
560 a. C. la ciudad pertenecía a Creso, rey de Lidia, y tiempo después pasó a
depender de Ciro II de Persia. Algunas fuentes aseguran que cuando Alejandro
Magno venció a Darío III, rey de los persas, y dominó toda el Asia Menor, puso
como gobernadora de Pérgamo a Barsine que era la viuda de un comandante persa de
Rodas.
El origen de la gran ciudad que llegó a ser, está en una ciudadela situada en la
parte más alta, donde el general Lisímaco de Tracia guardó sus tesoros. Se cree
que acaudaló una gran riqueza, hasta 9.000 talentos que junto con otras joyas
dejó en aquel lugar al cuidado del gobernador de la zona llamado Filetero (otros
autores le llaman Filetaro o Filetairo). |