La iglesia de madera de Urnes, declarada
Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1979, es una stavkirke (iglesia
medieval de madera) de las más antiguas de las 28 que se conservan en Noruega.
Está situada en el municipio de Luster, en el condado de Sogn og Fjordane.
La iglesia es propiedad de la Sociedad para la Conservación de los Monumentos
Históricos de Noruega.
Historia
Los análisis realizados a muestras de madera extraídas de la base del edificio
indican que los árboles utilizados en su construcción fueron talados entre 1129
y 1131. Pero se sabe que antes del edificio actual hubo otras dos iglesias en el
mismo lugar, y ciertos elementos de éstas se reutilizaron, tal como la fachada,
algunas planchas exteriores y algunas piezas decorativas talladas.
La iglesia marca la transición desde los métodos de construcción de los vikingos
con su típica ornamentación animal, el llamado «estilo de Urnes», y la
arquitectura cristiana.
El edificio
La iglesia está formada por una nave rectangular y un coro más estrecho, ambos
con el espacio central elevado. En el siglo XVII se amplió el coro, pero
posteriormente se eliminó esta modificación. En el siglo XX, la iglesia fue
restaurada, y los tablones decorados de las paredes se cubrieron para detener su
deterioro.
La portada norte
La portada y otros detalles del lado norte de la iglesia, así como los tablones
que sujetan las tejas, están decorados en el estilo de Urnes clásico y son
probablemente restos de las iglesias anteriores. Se ha enunciado la hipótesis de
que la portada pudo haber sido originalmente la entrada principal, situada en el
lado oeste.
Las imágenes de la portada representan lo que parece una serpiente arqueándose
hacia arriba. En la parte baja, un animal de cuatro patas, probablemente un león
estilizado, muerde a la serpiente. Se suele interpretar la escena como una
representación de la eterna lucha entre el bien —el león, que en la iconografía
cristiana representa a Cristo— y el mal — la serpiente, representación habitual
de Satanás. Por otro lado, es posible que se trate de una escena de la mitología
nórdica: el dragón Nidhogg royendo las raíces de Yggdrasil, el árbol de la vida. |