Dubrovnik (también llamada
Ragusa) es una ciudad costera de la actual Croacia. Tiene una población (2001)
de 43.770 habitantes. Es uno de los centros turísticos más importantes del mar
Adriático. Se la conoce como "la perla del Adriático", ya que sus antiguos
habitantes la distinguían como única, en una región llena de tanta barbarie.
Capital del condado de Dubrovnik-Neretva. Dubrovnik es una ciudad rodeada de
murallas y fortificaciones, al pie de una montaña que cae a pico sobre las aguas
del Mediterráneo.
En 1979, la ciudad antigua de Dubrovnik (el recinto amurallado) fue declarada
Patrimonio de la Humanidad por la Unesco; la declaración fue ampliada en 1994.
Historia.
Dubrovnik se fundó para unir dos pequeñas ciudades: Laus que estaba en una
pequeña isla al sur de la costa dálmata y Dubrava un asentamiento eslavo en una
colina. La ciudad se llamó oficialmente Ragusa hasta el año 1909. Nació en las
cercanías de la antigua Epidaurum (emplazamiento de la actual Cavtat o Ragusa
Vieja).
En el siglo VII, los habitantes de la región para acabar con las invasiones
eslavas que destruían sus casas, se refugiaron en un pequeño pueblo de
pescadores, sobre un grueso roquedal, y lo fortificaron. Rápidamente, este
refugio grecolatino se «eslavizó» a su vez. Los árabes no tardaron mucho en
interesarse por este puerto cada vez más próspero y lo atacaron en el siglo VIII.
Se cuenta que el mismo Roldán, el famoso caballero, acudió en ayuda de la ciudad
asediada y la liberó del invasor. En el siglo IX, Ragusa era ya la ciudad más
importante de Dalmacia, y formaba una pequeña república independiente (la
llamada República de Ragusa) bajo la soberanía nominal de los emperadores de
Bizancio. La ciudad y su término municipal ocupaban apenas una superficie
aproximada de 1 km2, pero sus navíos surcaban todos los mares del Levante, desde
el Adriático hasta el Bósforo.
Como Venecia, disponía de su propia flota de guerra para defenderse, pero no fue
suficiente para impedir que los normandos se adueñaran de la ciudad en 1081.
En el Siglo XII se erigieron murallas alrededor de la nueva ciudad para
protegerse de las invasiones que venían, tanto de Oriente como de Occidente. A
finales de dicho siglo, Ragusa era una de las Repúblicas que escogía a su
gobernante de manera democrática. La pujante república de Venecia, cuyos barcos
hacían escala en la costa dálmata, anhelaba anexionarse este puerto estratégico
para sus fines comerciales. La armada veneciana se puso en movimiento en 1205 y
conquistó la ciudad. La conservó hasta que, en 1358, Ragusa era llamada por los
habitantes que residían fuera de la ciudad, con el nombre Dubrovnik (del término
ilirio dubrava, bosque de robles) después de la absorción de los suburbios
eslavos, consiguió un estatuto especial. Tras aceptar el nombramiento de un
obispo, los raguseos conservaron el control comercial y político de su ciudad.
Al compartir los poderes, consiguieron mantener sus principales prerrogativas en
los asuntos ciudadanos. Cuando Venecia se retiró de Dubrovnik, aparecieron los
turcos por el este. |